Ataque de ansiedad. ¿Cómo lo combate tu cerebro?

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Introducción, qué es la ansiedad

Lo primero a recalcar es que recalcar es que hay que diferenciar entre ansiedad y trastorno de la ansiedad. Lo primero, como tal, no es una enfermedad, lo segundo sí. 
 
La ansiedad no es más que la preocupación excesiva de un evento adverso en el futuro. Con todo lo que ello conlleva. 
 
Se parece al miedo pero no es lo mismo. Si tu ves una serpiente, la estás viendo ahora, eso es miedo, la ansiedad es que pienses que si vas a la montaña igual te encuentras una serpiente. 
 
El miedo te protege. La ansiedad genera respuestas imprecisas, que no necesariamente te protegen, sino que te pueden poner en más riesgo. 
 
Además, otra diferencia es la duración de la respuesta. El miedo se va rápido, la ansiedad no. 
 

Introducción, qué es la ansiedad

Lo primero a recalcar es que recalcar es que hay que diferenciar entre ansiedad y trastorno de la ansiedad. Lo primero, como tal, no es una enfermedad, lo segundo sí. 
 
La ansiedad no es más que la preocupación excesiva de un evento adverso en el futuro. Con todo lo que ello conlleva. 
 
Se parece al miedo pero no es lo mismo. Si tu ves una serpiente, la estás viendo ahora, eso es miedo, la ansiedad es que pienses que si vas a la montaña igual te encuentras una serpiente. 
 
El miedo te protege. La ansiedad genera respuestas imprecisas, que no necesariamente te protegen, sino que te pueden poner en más riesgo. 
 
Además, otra diferencia es la duración de la respuesta. El miedo se va rápido, la ansiedad no. 

Cómo detectar un ataque de ansiedad

Puede que haya gente que haya vivido un ataque de ansiedad leve y ni siquiera lo haya identificado. 

Escuchaba a Ibai, el famoso stremar, en una entrevista decir que no sabía lo que era la ansiedad hasta que un día se fue a levantar de la cama y literalmente no podía. 

Yo hasta aquel momento imaginaba que un ataque de ansiedad era algo así como respiración acelerada y falta de aire. 

Entonces, ¿cómo son los síntomas de un ataque de ansiedad? ¿Cómo detectarlo? ¿Hay de diferentes tipos?

La respuesta ante la amenaza es pelear, huir o quedarse paralizado. Y en el caso de un ataque de ansiedad es esto mismo pero desmesurado. Esta sensación de parálisis, lo que sucede es que nuestro sistema de amenaza, la famosa amígdala, censa una amenaza, desencadena una respuesta excesiva, y lo que hace es que a nivel de la sustancia gris periacueductal, bloquea el impulso motor y entonces da esa sensación literal de parálisis. De querer moverse pero no poder hacerlo. 

Por otro lado puede dar esa respuesta de huída mediante un ataque de pánico: aumenta la frecuencia respiratoria, sentimos que nos ahogamos, sensación de palpitaciones, sudoración, visión borrosa, todo de una forma excesiva. 

A diferencia del miedo, normalmente suele darse de forma imprevista. Es una hipereactividad de nuestro sistema de alarma del cerebro y una respuesta excesiva ante esa hipersensibilidad. 

Cómo detectar un ataque de ansiedad

Puede que haya gente que haya vivido un ataque de ansiedad leve y ni siquiera lo haya identificado. 

Escuchaba a Ibai, el famoso stremar, en una entrevista decir que no sabía lo que era la ansiedad hasta que un día se fue a levantar de la cama y literalmente no podía. 

Yo hasta aquel momento imaginaba que un ataque de ansiedad era algo así como respiración acelerada y falta de aire. 

Entonces, ¿cómo son los síntomas de un ataque de ansiedad? ¿Cómo detectarlo? ¿Hay de diferentes tipos?

La respuesta ante la amenaza es pelear, huir o quedarse paralizado. Y en el caso de un ataque de ansiedad es esto mismo pero desmesurado. Esta sensación de parálisis, lo que sucede es que nuestro sistema de amenaza, la famosa amígdala, censa una amenaza, desencadena una respuesta excesiva, y lo que hace es que a nivel de la sustancia gris periacueductal, bloquea el impulso motor y entonces da esa sensación literal de parálisis. De querer moverse pero no poder hacerlo. 

Por otro lado puede dar esa respuesta de huída mediante un ataque de pánico: aumenta la frecuencia respiratoria, sentimos que nos ahogamos, sensación de palpitaciones, sudoración, visión borrosa, todo de una forma excesiva. 

A diferencia del miedo, normalmente suele darse de forma imprevista. Es una hipereactividad de nuestro sistema de alarma del cerebro y una respuesta excesiva ante esa hipersensibilidad. 

¿Cuál es la causa de un ataque de ansiedad?

Ahora imaginamos que esa persona, volvemos al ejemplo de Ibai, ya ha vivido un ataque de ansiedad, ya sabe lo que es. 

¿Por qué se produce? ¿Cuál es la causa de todo esto? ¿Acaso es un aviso de tu cerebro para que pares?

La ansiedad es una respuesta normal, como el miedo, como la rabia. 

La ansiedad, evolutivamente, está dada porque en nuestros ancestros el que detectaba la amenaza antes fue el que sobrevivía y el que nos pasó sus genes. 

Es decir, biológicamente todos los seres que son capaces de poder responder efectivamente a la amenaza, aunque sea desmesurada, es más probable que sobreviva. Por lo tanto, los humanos tendemos a la ansiedad.

¿De dónde viene? En primer lugar hay que atender a la genética, que tiene un peso de entre un 20 a un 40%. Por lo tanto, si tienes algún familiar con trastorno de la ansiedad es más probable que tú la padezcas. 

Pero no solo eso, también juega un papel importantísimo nuestra biografía. Aquí entra en juego la teoría del apego, esa capadiad de nuestros educadores para saber tranquilizarnos en nuestra primera infancia. Esto nos ayuda a identificar un entorno como hostil o como calmado. Si has tenido una infancia turbulencia esto afecta. Si has vivido en un entorno social agresivo, violento, con exceso de pobreza, todo ello hace que el ambiente en el que te educas atenta contra tu supervivencia y esto afecta a la ansiedad. 

 

¿Cuál es la causa de un ataque de ansiedad?

Ahora imaginamos que esa persona, volvemos al ejemplo de Ibai, ya ha vivido un ataque de ansiedad, ya sabe lo que es. 

¿Por qué se produce? ¿Cuál es la causa de todo esto? ¿Acaso es un aviso de tu cerebro para que pares?

La ansiedad es una respuesta normal, como el miedo, como la rabia. 

La ansiedad, evolutivamente, está dada porque en nuestros ancestros el que detectaba la amenaza antes fue el que sobrevivía y el que nos pasó sus genes. 

Es decir, biológicamente todos los seres que son capaces de poder responder efectivamente a la amenaza, aunque sea desmesurada, es más probable que sobreviva. Por lo tanto, los humanos tendemos a la ansiedad.

¿De dónde viene? En primer lugar hay que atender a la genética, que tiene un peso de entre un 20 a un 40%. Por lo tanto, si tienes algún familiar con trastorno de la ansiedad es más probable que tú la padezcas. 

Pero no solo eso, también juega un papel importantísimo nuestra biografía. Aquí entra en juego la teoría del apego, esa capadiad de nuestros educadores para saber tranquilizarnos en nuestra primera infancia. Esto nos ayuda a identificar un entorno como hostil o como calmado. Si has tenido una infancia turbulencia esto afecta. Si has vivido en un entorno social agresivo, violento, con exceso de pobreza, todo ello hace que el ambiente en el que te educas atenta contra tu supervivencia y esto afecta a la ansiedad. 

 

Cómo sobrellevar la ansiedad

Ya sabemos cuál es la causa de esos ataques, pero ahora, si aún con todo nos sucede, ¿qué podemos hacer para sobrellevarlo?

Aquí una parte importante es la previa. El conocimiento. 

Lo que pasa en un ataque de ansiedad es que este cerebro que viene predispuesto a identificarlo todo como hostil, su amígdala, crea una respuesta exagerada activando el hipotálamo y el sistema nervioso autónomo. Así que estamos en pleno ataque, al borde incluso de sentir que nos morimos. En ese momento no podemos hacer nada al respecto más que aceptarlo. La tranquilidad psicológica disminuye la intensidad del ataque de pánico. Si piensas que vas a morir y llevas tus pensamientos a lo peor, todo esto, juega en contra de un ataque de ansiedad. 

La realidad es que no te puedes morir de un ataque de ansiedad persé. Claro, puede que tengas una patología previa de corazón y que mueras de eso, pero no de un ataque de ansiedad. Puedes desmayarte, en el peor de los casos, pero es un mecanismo de tu cerebro de resetearte y volverías a recuperar. 

Saber esto, quizás te puede ayudar a tranquilizarte. 

 

Cómo sobrellevar la ansiedad

Ya sabemos cuál es la causa de esos ataques, pero ahora, si aún con todo nos sucede, ¿qué podemos hacer para sobrellevarlo?

Aquí una parte importante es la previa. El conocimiento. 

Lo que pasa en un ataque de ansiedad es que este cerebro que viene predispuesto a identificarlo todo como hostil, su amígdala, crea una respuesta exagerada activando el hipotálamo y el sistema nervioso autónomo. Así que estamos en pleno ataque, al borde incluso de sentir que nos morimos. En ese momento no podemos hacer nada al respecto más que aceptarlo. La tranquilidad psicológica disminuye la intensidad del ataque de pánico. Si piensas que vas a morir y llevas tus pensamientos a lo peor, todo esto, juega en contra de un ataque de ansiedad. 

La realidad es que no te puedes morir de un ataque de ansiedad persé. Claro, puede que tengas una patología previa de corazón y que mueras de eso, pero no de un ataque de ansiedad. Puedes desmayarte, en el peor de los casos, pero es un mecanismo de tu cerebro de resetearte y volverías a recuperar. 

Saber esto, quizás te puede ayudar a tranquilizarte. 

 

Resumen y puesta en práctica

Resumiendo: 
 
  • Saber que la ansiedad es un mecanismo normal de defensa del mecanismo. 
  • Desde el punto de vista evolutivo, aquellos que detectaron mejor la amenaza han pasado sus genes. 
  • Desde el punto de vista genético, se hereda de un 20 al 40%. 
  • Todos aquellos factores que durante nuestra infancia nos hicieran sentir que el entorno era hostil, favorecen la ansiedad. Esto refuerza el circuito de respuesta haciéndolo más hipersensible y más hiperactivo. 

Ahora, para nuestra puesta en práctica de hoy. ¿cómo prevenir la ansiedad?

Lo más importante es tener en consideración que la ansiedad persé no es mala. 

Lo segundo es estar plenamente consciente en qué momento una tendencia a la ansiedad se convierte en un trastorno para buscar ahuda. Esto es cuando nos está destruyendo nuestras relaciones, salud o capacidad de hacer vida normal. 

  1. Así que lo primero para prevenirlo es la toma de conciencia. 
  2. Lo segundo es estar conscientes de qué hábitos de nuestro estilo de vida y el ambiente que nos rodea no sol saludables. 
  3. Y lo tercero es saber que la narrativa que nos contamos y las etiquetas que nos ponemos, lo único que hace es empeorar nuestra tendencia a la ansiedad.

 

«Preocuparse es la causa de la ansiedad, ocuparse es la cura.» 

Resumen y puesta en práctica

Resumiendo: 
 
  • Saber que la ansiedad es un mecanismo normal de defensa del mecanismo. 
  • Desde el punto de vista evolutivo, aquellos que detectaron mejor la amenaza han pasado sus genes. 
  • Desde el punto de vista genético, se hereda de un 20 al 40%. 
  • Todos aquellos factores que durante nuestra infancia nos hicieran sentir que el entorno era hostil, favorecen la ansiedad. Esto refuerza el circuito de respuesta haciéndolo más hipersensible y más hiperactivo. 

Ahora, para nuestra puesta en práctica de hoy. ¿cómo prevenir la ansiedad?

Lo más importante es tener en consideración que la ansiedad persé no es mala. 

Lo segundo es estar plenamente consciente en qué momento una tendencia a la ansiedad se convierte en un trastorno para buscar ahuda. Esto es cuando nos está destruyendo nuestras relaciones, salud o capacidad de hacer vida normal. 

  1. Así que lo primero para prevenirlo es la toma de conciencia. 
  2. Lo segundo es estar conscientes de qué hábitos de nuestro estilo de vida y el ambiente que nos rodea no sol saludables. 
  3. Y lo tercero es saber que la narrativa que nos contamos y las etiquetas que nos ponemos, lo único que hace es empeorar nuestra tendencia a la ansiedad.

 

«Preocuparse es la causa de la ansiedad, ocuparse es la cura.» 

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